La tierra roja de alta pureza es un material muy peculiar. En el proceso de secado, las sales insolubles que se cristalizan gradualmente hacen que la tierra se solidifique hasta formar un todo sólido difícil de ser erosionado, ni siquiera por el viento o la lluvia. Lo más interesante es que, para los dromas, la tierra roja más deliciosa está justo en el límite entre húmeda y seca. "¿Y si siempre está lloviendo? ¿Desarrollarían los dromas un trastorno de alimentación?". "En teoría, es posible. Pero Aquila no dejaría que eso ocurriera, así que no te preocupes".