En ocasiones, la Guardia Crinargenta organiza competiciones en las que los participantes tienen que encontrar una parte del cuerpo de un monstruo antes de que acabe el tiempo. Este fragmento de la hoja de una espada debió utilizarse en una de esas competiciones. "Fui testigo con mis propios ojos de cómo Gepard hizo añicos la hoja de acero sobrecalentado de aquel tipo de un puñetazo; después la agarró y atravesó de una arremetida su vientre helado, haciendo que su corazón entrase en calor".